La misión, anunciada por Almagro en un Consejo Permanente
especial la semana pasada, comienza este viernes en Santo Domingo y termina el
martes en Puerto Príncipe
Foto: "El objetivo es valorar sobre el terreno
la situación migratoria de la población haitiana para facilitar una solución
duradera que regularice el estatus de los inmigrantes, porque no podemos
olvidar que los inmigrantes, más allá de su situación legal, tienen los mismos
derechos que todas las personas", dijo hoy Almagro en el segundo Consejo
Permanente especial de la OEA sobre la crisis entre Haití y República
Dominicana
Washington, 8 jul (EFE).- La Organización de Estados
Americanos (OEA) enviará entre los días 10 y 14 de julio una misión a República
Dominicana y a Haití ante la crisis migratoria entre estas dos naciones
vecinas, informaron hoy a Efe fuentes del organismo.
La delegación de la OEA estará encabezada por el secretario
de Asuntos Políticos de la OEA, Francisco Guerrero, al que acompañará Gabriel
Bidegain, asesor del secretario general, Luis Almagro.
La misión, anunciada por Almagro en un Consejo Permanente
especial la semana pasada, comienza este viernes en Santo Domingo y termina el
martes en Puerto Príncipe.
“El objetivo es valorar sobre el terreno la situación
migratoria de la población haitiana para facilitar una solución duradera que
regularice el estatus de los inmigrantes, porque no podemos olvidar que los
inmigrantes, más allá de su situación legal, tienen los mismos derechos que
todas las personas”, dijo hoy Almagro en el segundo Consejo Permanente especial
de la OEA sobre la crisis entre Haití y República Dominicana.
La semana pasada, el ministro de Exteriores de la República
Dominicana, Andrés Navarro, defendió ante la OEA que “el número de casos de
apátridas” derivados de la política migratoria de su país “es cero”.
Hoy, su homólogo haitiano, Lener Renauld, pidió ante el
Consejo Permanente de la OEA la intervención internacional en esta crisis para
evitar una “catástrofe humanitaria” que podría constituir una “amenaza para la
seguridad nacional” y desestabilizar el país en año electoral.
“Solicitamos la intervención solidaria de todos los amigos
de la comunidad internacional, el Caricom (la Comunidad del Caribe, a la que
pertenece Haití pero no su vecino), la ONU y la OEA para hacer que la República
Dominicana entre en razón y de un trato más humano a los inmigrantes
haitianos”, afirmó el canciller.
Renauld subrayó la disposición de su Gobierno al diálogo con
República Dominicana para encontrar una solución a esta crisis y evitar “las
deportaciones masivas que dividirían familias nucleares”.
El pasado 17 de junio terminó en República Dominicana el
plazo de inscripción al Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, al que
se acogieron unos 288.000 extranjeros, una cifra que se suma a las otras 8.755
personas que se adhirieron a una ley de naturalización, concluida meses antes.
El Plan Nacional de Regularización de Extranjeros surgió como
parte de las medidas tomadas por el Gobierno para hacer cumplir la sentencia
168-13 del Tribunal Constitucional (TC), que establece los parámetros para
obtener la nacionalidad dominicana.
Esa disposición estipula que no son dominicanos los hijos de
inmigrantes indocumentados a pesar de haber nacido en el país, ni tampoco los
descendientes de extranjeros “en tránsito” en la nación.
Esta decisión afectó principalmente a miles de haitianos
indocumentados residentes desde hace años en territorio dominicano.
Haití y entidades no gubernamentales como Amnistía
Internacional y Human Rights Watch han acusado a República Dominicana de
convertir en apátridas a miles de haitianos con el nuevo plan migratorio.
El Gobierno dominicano ha rechazado esas acusaciones y ha
señalado que Haití no otorgó los documentos de identidad a miles de sus
ciudadanos cuando tuvo toda la oportunidad de hacerlo.
Según la información oficial, un total de 36.593
indocumentados han abandonado voluntariamente República Dominicana desde el pasado
18 de junio, un día después de que venciera el plazo de inscripción en el Plan
Nacional de Regularización de Extranjeros. EFE